Tengo un problema muy serio.
Sí, contigo.
¿Te tengo que seguir mandando indirectas?
Es que me produces arcadas, rabia, dolor e incluso sacas mi otro yo.
Sí, estoy cabreada, mucho.
Porque no se que idiota tuve que ser para quererte.
Porque mírate, yo estaba sufriendo y tú ahí, riéndote.
¡Há! Tranquilo, no volveré a caerme con la misma piedra, porque ya, no te quiero.
Tienes un blog I N C R E I B L E!!!! :D
ResponderEliminarEscribes genial :)
Te sigo, te espero por http://bombeandochocolate.blogspot.com.es/
Un beso!!